Bajos índices de mortalidad infantil, logro que materializa el programa del Moncada

 

La obra social generada por la Revolución cubana es tan grande que le permite compararse en muchos parámetros con los países desarrollados como Estados Unidos, Canadá, Francia, Inglaterra y Alemania, entre otros.

Para una nación de pocos recursos naturales y bloqueada económicamente por los Estados Unidos desde hace más de 50 años como Cuba, es motivo de satisfacción exhibir un indicador relacionado con el nivel de vida de la población, como el de la tasa de mortalidad infantil, que puede compararse a los que logran las naciones ricas.

Florida es un ejemplo de tal logro de la salud cubana: al término del décimo mes del presente año 2012 materializa un índice de tres coma seis muertes por cada mil niños menores de un año nacidos vivos, una cifra bien inferior a la que mantienen la mayoría de los pueblos africanos, latinos y de otras partes del mundo. 

Ello es posible gracias a la materialización continua de la obra de la Revolución en el cumplimiento de lo planteado por Fidel Castro Ruz en su alegato de defensa La Historia me absolverá; disertación conocida como el “Programa del Moncada”, donde el líder de la Revolución Cubana enuncia medidas que se aplicarían luego del triunfo, para resolver los principales problemas del pueblo.

Vale recordar que entre las tantas denuncias hechas por el Líder de la Revolución en el juicio por el Asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes resaltó que: “La sociedad se conmueve ante la noticia de tantas muertes infantiles, pero el gobierno de Fulgencio Batista se mantiene indiferente ante el asesinato en masa que se comete con tantos miles y miles de niños que mueren todos los años por falta de recursos”.

Hoy, a 53 años de la victoria definitiva sobre los opresores del pueblo, garantizar la supervivencia de cada niño que nace en este municipio camagüeyano  es una tarea que asumen con responsabilidad los trabajadores de las distintas instituciones de la Salud Pública y otras entidades sociales, responsabilizadas con la calidad de vida del pueblo.