La Huelga que estremeció los cimientos de la tiranía batistiana

 El 9 de abril de 1958 Cuba amaneció agitada,  aquel día, inicio de la  huelga  general obrera, se reportaron paros de trabajadores en ciudades, pequeños poblados y campos a  lo largo del país, que dejaron sentir  en menor  o  mayor  intensidad,  el calor  revolucionario y la antipatía  del pueblo contra la feroz tiranía batistiana.

A decir del Doctor  Faustino Pérez, principal  dirigente del Movimiento-26 de Julio, la huelga No logró el objetivo propuesto de derrocar la  tiranía, pero estremeció sus cimientos  y demostró una vez más la irreducible decisión de lucha y sacrificio de nuestro pueblo revolucionario y su voluntad de victoria.

  Durante aquella jornada se luchó y murió en todo el país, por eso las acciones protagonizadas contra la impopular  y sangrienta  dictadura de Batista, se inscriben en nuestra historia más reciente, como una página gloriosa del pueblo en la lucha por su libertad.

En Florida se  lograron varias acciones :  tiroteos  contra vehículos, se  impidió  que  la  emisora local  saliera al  aire, trabajadores de varios  sectores participaron en el paro, entre ellos  los  empleados de los dos  bancos existentes en la  ciudad, el  transporte,  empresa eléctrica  y telefónica, las  tabaquerías  y  gran  parte del comercio.

La policía  y el ejército  impidieron  que  los  centrales  Florida  e  Ignacio Agramante  se  sumaran  a la  Huelga ,   no  obstante  hubo  acciones  aisladas  de  sabotajes que  afectaron las operaciones de  ambas   industrias, en las  colonias  NO  se  cortó  caña  durante  dos días  y el  paro llegó  hasta embarque  de  azúcar  en el  Puerto de Santa María.

El  libro de  la  historia de  Florida  destaca  que  en los  centrales Céspedes  y Estrella, tuvieron lugar hechos importantes  relacionados con esta Huelga Obrera.  El día 10  de  abril  de  1958, a las  nueve de la mañana, al toque  de las  sirenas de  los dos  centrales, se paralizaron las labores de  la zafra, incluyendo las colonias, los obreros, campesinos y pueblo  apoyaron las  acciones y sus dirigentes  fueron  golpeados  y amenazados de muertes.

Al  recordar  los  acontecimientos de la  Huelga General   del  9  de  abril  de  1958,  la historia recoge que los trabajadores de Florida  y  Céspedes  respondieron  a la convocatoria nacional del paro, con acciones  diversas durante  casi  tres días , jornadas  que  propiciaron el fortalecimiento  de la dirección del  movimiento  del 26  de Julio en el territorio.