Como mariposas en el campo así son nuestros niños

 

Este día de junio los niños en las escuelas y círculos infantiles parecen mariposas revoloteando en el más hermoso jardín. Juegan, ríen, cantan.

Unos fantasean con ser mayores y dueños del hogar al tiempo que organizan cada objeto de “la casita” y se distribuyen los tradicionales personajes de “Mamá”, “Papá” y “Nené”.
Otros asumen el rol de doctores del consultorio de la familia, maestros de la “escuelita”, campesinos, obreros de una fábrica o carpinteros.

Al verlos así tan concentrados y dispuestos a hacer realidad sus sueños de infantes, me convenzo más aún de la máxima martiana de que: “los niños son la esperanza del mundo”.

De amor, ternura, ilusión y esperanza se pinta el alma de quienes vivimos en Cuba cada Primero de junio porque es el día de más felicidad para nuestros niños y niñas.

Sin embargo el corazón se me oprime al pensar en la cifra millonaria de infantes que viven en la pobreza y los más de 27 mil menores de cinco años que mueren cada día por causas evitables.

A todos ellos dedicamos el derecho a ser felices que tienen los infantes cubanos. A todos ellos, llegue este, día la más alegre sonrisa de los niños y niñas cubanos.