El voto unido, más que una consigna una convicción

 

Ejercer el voto para un cubano, a más de cinco décadas del triunfo revolucionario, es mucho más trascendente que el mero hecho de plantear una conformidad con propuesta alguna; es poner en manos de los más capaces la dirección del país y la orientación inteligente de la marcha de un proyecto socialista, más justo que cualquier otro vivido por la humanidad en época alguna.
Es dedicarnos, con seriedad y responsabilidad, a definir el futuro de una nación que despierta todos los días apostando por un mundo mejor para cada ser viviente en la Tierra.

Los electores floridanos confiamos en el proceso ampliamente democrático, participativo y popular donde se eligieron y seleccionaron las propuestas para diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular y delegados a las asambleas provinciales.

En ellos están representados todos los sectores de nuestra sociedad: jóvenes, campesinos, soldados, artistas, deportistas, intelectuales, sin distinción de raza, sexo o nivel de instrucción, lo que evidencia una expresión elevada de la igualdad y la justicia social alcanzada durante estos años de Revolución.

La convocatoria a una votación de todos y por todos con una participación masiva y puntual en las próximas elecciones, no es una consigna, sino una estrategia política que significa el voto por la patria.

Ello es posible por que contamos con la madurez política necesaria para un momento de definición patriótica como este, donde también votaremos en nombre de Ramón, René, Gerardo, Antonio y Fernando, privados de ejercer este derecho ciudadano por el cruel e injusto encarcelamiento a que son sometidos en Estados Unidos.

El 3 de febrero, los floridanos, al igual que el resto de los cubanos votaremos por nuestras ideas y nuestros valores, por la justicia y el honor, por la independencia y la dignidad, por el futuro de nuestra Patria y la humanidad, por el mérito, por la capacidad y por lo que nos ha hecho verdaderamente invulnerables durante estos años: la unidad en el apoyo a la Revolución y a la construcción del socialismo.